¿Piensas hacerte un tatuaje? Sólo ten esto en mente: tendrás que vivir con la versión sanada del tatuaje, no la versión fresca, cuando recién sales del estudio.
Es cierto, el tatuaje que tu tatuador fotografía inmediatamente después de terminar tu pieza seguramente no es representativo de cómo se verá un mes después y esta regla aplica para todos los tatuajes que se fotografían en el estudio. ¿Pero por qué?
Un tatuaje fresco se ve diferente porque no está cubierto de una capa de piel libre de tinta y las partículas de tinta no han tenido tiempo para sentarse en su ubicación permanente. Esto significa que se verá menos vibrante ya sanado. El grado de cambio depende de muchos factores, como la exposición a los elementos, los colores que se usaron, la piel de quien lleva el tatuaje y la técnica del tatuador. Falta de cuidado después o quitando las costras tendrá un enorme efecto en el resultado.
Aquí mira la diferencia entre un tatuaje fresco y el mismo ya sanado. De verdad, no tengas miedo preguntarle cosas a tu tatuador, puedes evitar un mal tatuaje al informarte bien de cómo se va a ver tu tatuaje cuando haya sanado un mes después de hacértelo.
Como puedes ver en este caso, el rojo aún se ve muy fuerte aunque se haya mezclado un poco con los negros, mientras que los azules ligeros se han desvanecido. La forma del tatuaje no se distorsionó, es el ángulo de la foto.
Es común que en el caso de los tatuajes negros y grises, la versión sanada se ve mejor, principalmente debido a el sombreado asimilándose en la piel, volviéndose más sutil.
Aquí la versión sanada está en la izquierda. Como puedes ver, el sombreado se ha asimilado, sin embargo, en esta ocasión se volvió difícil distinguir los detalles en la parte superior que se podían ver en la versión fresca, como las nubes, el ojo y la cruz.
La diferencia más evidente aquí es que se desvaneció el sombreado que afecta las sombras y las venas rojas en el ojo. Los colores pierden todo su brillo.
No sólo decició Bruce Willis usar un lindo sombrerete, pero los negros se han desvanecido, haciendo que Jessica Alba se vea fea, ridícula e irreconocible.
Aquí el sombreado es mucho más sutil, haciendo que la pieza se vea más “realista,” pero se ha desvanecido tanto que ya apenas está visible el tatuaje.
Si, es el mismo tatuaje, el pelo sólo se ve distinto por el ángulo. Los azules y los rojos sobrevivieron, pero mucho de ese bello sombreado en la cara y el cabello simplemente dejaron de existir.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.